Oscar Rodríguez | Corresponsal
Durante un mitin en Oaxaca, el candidato presidencial de las
izquierdas reiteró que acabará con el cacicazgo de Elba Esther Gordillo y
solicitó a los maestros comprometerse a mejorar.
Foto: Oscar Rodríguez
Oaxaca • El candidato presidencial de las
izquierdas, Andrés Manuel López Obrador, anunció que desde Oaxaca, y con
el consenso de los profesores de la Sección 22 del Sindicato Nacional
de Trabajadores de la Educación (SNTE), habrá de construir el modelo
educativo, que regirá a la República amorosa, de ganar las elecciones
del próximo 1 de julio, donde ya no se tolerará la injerencia de Elba
Esther Gordillo Morales.
“Yo le pido a los maestros de Oaxaca, al sindicato democrático que nos sentemos a platicar, porque habrá un gran acuerdo, mi gobierno habar de mejorar la calidad de las escuelas, otorgará uniformes y útiles escolares, becas y se terminará con el cacicazgo de Elba Esther Gordillo, a cambio le pido a los profesores comprometer a mejorar, aplicarse para que haya clases de lunes a viernes”.
Ante un plaza llena, donde se congregaron a más de 30 mil asistentes, según los organizadores, aunque la dirección de tránsito municipal reportó una asistencia de 20 mil espectadores, López Obrador dijo que sólo al lado de los profesores de Oaxaca y sin ejercer autoritarismo, ni represión, sólo respetando la independencia sindical se fortalecerá el sistema educativo nacional.
Dijo que una vez que gane las elecciones recorrerá el país y uno de los primeros estados que visitará en su envestidura de presidente electo será Oaxaca, donde acudirá a establecer un gran acuerdo con los profesores. “Mi compromiso es claro y quiero reciprocidad”, confió el tabasqueño.
Para el aspirante a la silla presidencial no puede haber en México una auténtica democracia si no hay una eficiente educación.
En su discurso, acompañado del líder nacional del PRD, Jesús Zambrano, López Obrador dijo que protegerá el voto ciudadano y la democracia con el respaldo de las redes sociales, además de que se cuidarán por los 450 mil miembros de Morena cada una de las casillas que se habrán de instalar en todo el territorio nacional durante la contienda del 1 de julio.
“Sé que vamos a ganar, ya tengo el norte y sur de mi lado, solo falta dar el último jalón”, afirmó.
Aclaró que es la última oportunidad que tienen los electores para cambiar el rumbo del país, evidenciando que los mexicano se encuentra de frente a la cuarta trasformación nacional, luego de los movimientos de Independencia, la Revolución y la reforma de 1957.
Reiteró que combatirá las raterías, que terminará con la corrupción, con los 15 millones de pobres, permitiendo que el país tengan ahorros y fondos propios por el orden de los 600 mil millones de pesos con los que financiera acciones de progreso para socavar la pobreza y de justicia para lograr que México deje de ocupar el último lugar en competencia, emulando los alcances de naciones nórdicas como Noruega o Dinamarca donde hay una clase media fortalecida, y no hay riquezas acumuladas en manos de unos cuantos.
Dijo que es un hombre de principios, de convicciones, que no le temblará la mano para hacer valer la ley no la venganza contra quienes han saqueado y oprimido al pueblo mexicano.
Anticipó que terminará con el salario de altos funcionarios, ya no habrá gente en el gobierno que perciba sueldos de 200 mil y 600 mil pesos, “todos tendrán que aprender a vivir en la medianía, a recibir salarios decorosos.
Ya no permitiremos gasto para la parafernalia, no habrá más políticos ladrones, mediocres y fantoches, les vamos a quitar el copete, vamos a descopetar a todos”.
De sus adversarios, afirmó que ya siente el temor de su derrota, “han visto cómo se ha desinflado su candidato Enrique Peña”.
López Obrador respondió al grito de su audiencia que le pidió “muera Televisa” y dijo que no “morirá Televisa, pero si habrá fin al monopolio”.
“Yo le pido a los maestros de Oaxaca, al sindicato democrático que nos sentemos a platicar, porque habrá un gran acuerdo, mi gobierno habar de mejorar la calidad de las escuelas, otorgará uniformes y útiles escolares, becas y se terminará con el cacicazgo de Elba Esther Gordillo, a cambio le pido a los profesores comprometer a mejorar, aplicarse para que haya clases de lunes a viernes”.
Ante un plaza llena, donde se congregaron a más de 30 mil asistentes, según los organizadores, aunque la dirección de tránsito municipal reportó una asistencia de 20 mil espectadores, López Obrador dijo que sólo al lado de los profesores de Oaxaca y sin ejercer autoritarismo, ni represión, sólo respetando la independencia sindical se fortalecerá el sistema educativo nacional.
Dijo que una vez que gane las elecciones recorrerá el país y uno de los primeros estados que visitará en su envestidura de presidente electo será Oaxaca, donde acudirá a establecer un gran acuerdo con los profesores. “Mi compromiso es claro y quiero reciprocidad”, confió el tabasqueño.
Para el aspirante a la silla presidencial no puede haber en México una auténtica democracia si no hay una eficiente educación.
En su discurso, acompañado del líder nacional del PRD, Jesús Zambrano, López Obrador dijo que protegerá el voto ciudadano y la democracia con el respaldo de las redes sociales, además de que se cuidarán por los 450 mil miembros de Morena cada una de las casillas que se habrán de instalar en todo el territorio nacional durante la contienda del 1 de julio.
“Sé que vamos a ganar, ya tengo el norte y sur de mi lado, solo falta dar el último jalón”, afirmó.
Aclaró que es la última oportunidad que tienen los electores para cambiar el rumbo del país, evidenciando que los mexicano se encuentra de frente a la cuarta trasformación nacional, luego de los movimientos de Independencia, la Revolución y la reforma de 1957.
Reiteró que combatirá las raterías, que terminará con la corrupción, con los 15 millones de pobres, permitiendo que el país tengan ahorros y fondos propios por el orden de los 600 mil millones de pesos con los que financiera acciones de progreso para socavar la pobreza y de justicia para lograr que México deje de ocupar el último lugar en competencia, emulando los alcances de naciones nórdicas como Noruega o Dinamarca donde hay una clase media fortalecida, y no hay riquezas acumuladas en manos de unos cuantos.
Dijo que es un hombre de principios, de convicciones, que no le temblará la mano para hacer valer la ley no la venganza contra quienes han saqueado y oprimido al pueblo mexicano.
Anticipó que terminará con el salario de altos funcionarios, ya no habrá gente en el gobierno que perciba sueldos de 200 mil y 600 mil pesos, “todos tendrán que aprender a vivir en la medianía, a recibir salarios decorosos.
Ya no permitiremos gasto para la parafernalia, no habrá más políticos ladrones, mediocres y fantoches, les vamos a quitar el copete, vamos a descopetar a todos”.
De sus adversarios, afirmó que ya siente el temor de su derrota, “han visto cómo se ha desinflado su candidato Enrique Peña”.
López Obrador respondió al grito de su audiencia que le pidió “muera Televisa” y dijo que no “morirá Televisa, pero si habrá fin al monopolio”.
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