Trabajador de la CTM se encadena y exige solución a huelga en Acapulco

El trabajador del restaurante y salón de baile Tropicana, Lauro Salinas Nava, delegado de la sección 40 de la Confederación de Trabajadores Mexicanos, se encadenó esta mañana e inició un ayuno para exigir, después de más de cinco años de huelga, que autoridades estatales contribuyan a resolver la situación en que se encuentra.

Salinas Nava, solicitó también a las autoridades que se termine con el acoso en su contra por desalojarlo del terreno, ubicado en zona federal, donde se encontraba la fuente de trabajo.

Con más de 35 años laborando en el sitio, ubicado en la playa Carabalí, Salinas Nava expresó que “fui amenazado por el secretario del Trabajo, Alberto López Rosas, quien solamente me ofrece 45 mil pesos por 35 años laborando en el Tropicana”.

El afectado explicó que sus siete compañeros ya aceptaron dicha cantidad de dinero, pero él se niega por considerarlo una cantidad muy baja.

“López Rosas me dijo que aceptara ese dinero pues no voy a ser eterno aquí, pero no es justo, nos deben salarios y la indemnización”.

Responsabilizó a López Rosas si llegar a sucederle algo a él o a su familia.

Recordó que el 30 de enero del 2009, la huelga fue provocada por la falta de pago de mes y medio de salario, así como de aguinaldo y diversas prestaciones.

Señaló que los trabajadores perjudicados en su momento hicieron un ofrecimiento a la que fuera propietaria del restaurante y centro de espectáculos, Emilia Pavón Vega, quien se deslindó de su responsabilidad como patrona al expresar que había perdido la concesión del local, hace aproximadamente tres años, el cual se encuentra en zona federal.

Autoridades estatales desean desalojar el sitio para continuar el proyecto de remozamiento de la zona Tradicional del puerto.

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