La arquidiócesis de Acapulco hizo un llamado a frenar la corrupción. Alto a los corruptos, es el nombre del comunicado de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), leído por el arzobispo Carlos Garfias Merlos con motivo de la conferencia dominical, en la catedral de Nuestra Señora de la Soledad.
“Todos somos tentados de corrupción”, citó el prelado al papa Francisco, y recordó que “son siempre los pobres quienes pagan el precio de la corrupción de los políticos, de los empresarios y de los eclesiásticos que descuidan su deber pastoral”.
Añadió que “pagan los hospitales sin medicinas, los enfermos que no tienen remedio, los niños sin educación”, y advirtió que “cuando hay corrupción también el pobre corre el riesgo de perder los valores, porque se le imponen costumbres, leyes, que son contrarias a los valores”.
Garfias Merlos puntualizó que para combatir la podredumbre es necesario una reforma de leyes, y la creación de instituciones, que de forma coordinada e integral, prevengan, identifiquen, investiguen y modifiquen en tiempo real, situaciones o condiciones que propicien la corrupción, además de sancionar oportunamente a los corruptos y hagan realidad el resarcimiento de los daños causados.
A nombre de la CEM, el prelado Garfias Merlos criticó la figura de impunidad, y señaló que se debe reflexionar acerca del juicio político.
Expresó que “no puede quedar fuera de esta reforma la revisión del fuero del que gozan algunos servidores públicos y que podría hacer naufragar el sistema entero si es utilizado como escudo de impunidad.
Agregó que “se debe replantear la figura del juicio político tanto en sus sujetos como en los supuestos que lo pueden originar, ya que actualmente existe demasiada discrecionalidad y laxitud”.
El arzobispo de Acapulco manifestó que es indispensable que el combate a la corrupción no sea usado con fines de persecución política o de revancha mediática. Recalcó que “la solución al problema no se arregla con maquillajes”.
En su comunicado, Garfias Merlos advirtió que “en Guerrero es dramática la situación de injusticia social”, por lo que “es importante crear condiciones de justicia social para favorecer un desarrollo social que favorezca la seguridad y la paz. Si hay verdad y justicia de frente al pueblo habrá más confianza”.
Insistió en que las autoridades deben ofrecer pruebas reales en cualquier investigación, en la cual, enfatizó, “debe ser palpable la verdad”.LA CHICA RALEIGH, la mejor novela de los últimos tiempos, de un autor acapulqueño. ADQUIERELA YA en puestos de revistas o pídela a zenon71@hotmail.com
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