Gallery

header ads

  Hay sucios negocios de líderes de la CETEG detrás de paro en oficinas

SALUDOS
?
Conspiraciones
 
Por Jorge Romero Rendón
 
     Los paros en oficinas de la Secretaría de Educación Guerrero (SEG) y el bloqueo de calles que ha realizado la CETEG
usando a personal administrativo como carne de cañón, en supuesta protesta contra la Alianza por la Calidad Educativa (ACE),
es en realidad una estrategia para defender el sucio negocio de la venta de plazas que promueven líderes cetegistas mediante la "gestión de jubilaciones" y de otras incidencias de nómina.
     Durante los últimos días, dirigentes de la CETEG como
Gonzalo Juárez Ocampo  y Minervino Hernández Morán han declarado públicamente que el cierre forzado de algunas oficinas de la SEG es parte de una protesta contra la ACE federal, contra el Pacto Social por la Educación estatal, y contra la Evaluación Universal de los maestros.
Motivos tan flojos como el hecho de que la ACE lleva ya tres años aplicándose exitosamente en Guerrero; el Pacto está en construcción con la participación de diversos sectores sociales; y la Evaluación es un tema federal.
     Sin embargo, no importa qué tan flojos sean los argumentos de la CETEG, sino el hecho de que
en sus reuniones secretas con funcionarios de la SEG, el dirigente Juárez Ocampo y sus compañeros de la llamada Comisión Política cetegista tratan de negociar sus prebendas personales.
     La principal de sus demandas es
que se les permita seguir haciendo negocio con la gestoría de todo tipo de incidencias de nómina, como defunciones, jubilaciones, renuncias, licencias e incapacidades, que les reportan ganancias por varios millones de pesos.
     Déjeme decirle que el esquema que usan los líderes y gestores de la CETEG es la "representación" de maestros o sus familiares que tramitan por ejemplo una jubilación. Tradicionalmente, el maestro que se quiere jubilar propone a un familiar con el perfil profesional que le permita ocupar su plaza. Si se aprueba, el familiar recibe un porcentaje de la categoría o clave del jubilado, y
el resto del costo medido en horas de esa plaza debería regresar a un fondo de la SEG para recuperar ese recurso y financiar a futuro nuevas plazas.
     Pero en lugar de eso,
los líderes de la CETEG se quedaban con el porcentaje de la plaza no ocupado por el familiar del jubilado, simplemente por "derecho de gestoría", para financiar nuevas plazas o recategorizaciones que después venden en 80, 100 o 150 mil pesos cada una a otros particulares, lo que implica una fuerte pérdida para las finanzas de la SEG, pero que es un pingüe negocio de los cetegistas.
     Incluso ahora el líder
Juárez Ocampo quiere ampliar el negocito al exigir que no solo familiares directos de los jubilados se puedan quedar con parte de su plaza, sino también terceras personas -sus otros clientes, a quienes venderán directamente las horas restantes- ajenas, aunque claro, aduciendo como pretexto que eso la harían para beneficiar a normalistas que no hayan ganado alguna plaza por concurso. Pero no dicen que en realidad
se la venden al mejor postor, con o sin perfil profesional.
     De ahí que el líder cetegista defiende su negocio con uñas y dientes, promoviendo paros en los que involucran a personal administrativo, debido a que la CETEG controla algunas delegaciones sindicales, a las que ponen en pie de lucha como carne de cañón. porque los únicos que ganan son ellos, los líderes.
 
Combate la SEG venta de plazas.
 
     Al respecto,
la postura de la secretaria de Educación, Silvia Romero Suárez ha sido la de defender el patrimonio de la SEG, por lo que está combatiendo la corrupción, especialmente la venta de plazas, al tiempo de que busca instrumentar un mecanismo fijo que elimine la tradición de heredar plazas.
    La propuesta de la maestra Romero es aplicar
una tarifa de liquidación de cada plaza de quien se jubile, para darle una compensación por ella, para que el 100% de los costos que representa cada plaza se reintegre a la SEG y
con ese recurso financiar la creación de nuevas plazas, sobre todo ahora que la federación ha disminuido tremendamente la aportación de plazas a Guerrero (el año pasado la SEP solo envió 36 plazas y el gobierno estatal -con apoyo del SNTE- tuvo que financiar más de 400).
     De manera que lo que vemos en los paros organizados por Juárez, Minervino y sus secuaces, es
una lucha encarnizada por forzar a la SEG a que les permita seguir haciendo transas y enriquecerse, tal y como lo hemos visto en otros dirigentes cuyos casos hemos documentado en esta columna.
     La política de la maestra
Silvia Romero, apoyada decididamente por el gobernador Ángel Aguirre, debe imponerse a pesar de las presiones ilegítimas, mentirosas y escandalosas de los líderes de la CETEG, porque no se puede seguir hipotecando las finanzas estatales para darle chance a cetegistas corruptos de hacer fortuna con el dinero del presupuesto público. ¿O usted vota porque nos sigan transando?
     Correo electrónico:
rendon59@gmail.com 
?

Enviado desde mi oficina móvil BlackBerry® de Telcel

Publicar un comentario

0 Comentarios